FENG SHUI EMPRESAS

Cómo ayudamos a tu empresa

Distribución interna:

Evaluar la disposición interna de los espacios. Considerar la ubicación de las diferentes áreas, como la recepción, las oficinas y las salas de reuniones. Buscar formas de equilibrar y distribuir la energía de manera uniforme.

Colocación de muebles y elementos decorativos:

Examinar la disposición de los muebles y la decoración en las diferentes áreas. Ajustar la posición de escritorios, sillas y otros elementos para facilitar un flujo de energía armonioso. Evitar la acumulación de objetos innecesarios que puedan obstruir el paso del qi.

Uso del color y la iluminación:

Considerar el uso de colores y la iluminación en el espacio. Los colores y la iluminación adecuados pueden afectar positivamente la energía en el entorno laboral. Utilizar colores que se asocien con la productividad y asegúrate de que haya una buena iluminación natural y artificial.

Equilibrio de los cinco elementos:

Asegurarte de que los cinco elementos del Feng Shui (madera, fuego, tierra, metal y agua) estén representados de manera equilibrada en el espacio. Cada elemento tiene su propia energía y propiedades, y el equilibrio entre ellos es esencial para mantener una armonía adecuada.

Tratamiento de áreas problemáticas:

Identificar áreas problemáticas, como esquinas afiladas, columnas o elementos arquitectónicos inusuales. Aplica remedios de Feng Shui, como espejos, plantas o colores específicos, para mitigar cualquier energía negativa asociada con estas áreas.

Tratamiento de áreas del personal:

Asegurar que las personas en el lugar de trabajo estén ubicadas estratégicamente es esencial para fomentar un ambiente agradable y propiciar relaciones de colaboración positivas. Esta armonía no solo mejora la satisfacción personal de los empleados, sino que también contribuye al éxito general del negocio y, como resultado, al aumento de sus ingresos.

Proyección hacia el exterior:

Proyectar una imagen positiva ante sus clientes actuales y potenciales. Esta imagen positiva actúa como un catalizador para establecer una comunicación eficiente, en constante crecimiento y estable con ellos. La eficiencia y expansión del negocio se ven favorecidas por esta conexión sólida.

Además, es fundamental realizar un análisis detallado del logo e imagen de la empresa para garantizar coherencia y efectividad.